martes, 13 de diciembre de 2011

Anoche volví a verlo,
al principio le tenía miedo
ahora veo que es él quien me teme a mí,
no entiende por qué yo huía antes
ni por qué ahora busco su compañía
puedo ver la desconfianza en sus ojos
y puedo leer su historia en su piel.
No le culpo por su desconfianza
apenas me considero merecedor de mirarlo.
Pero algo en el me llama
y deseo tocarlo,
solo puedo aguardar con esperanza que me lo permita.
Las noches y los meses se suceden
y aunque sigue visitándome
no me permite aproximarme
anoche por fin me dejo tocarlo,
su piel es tan suave y cálida……
aunque no fue como imaginé,
su expresión había cambiado
me miraba con infinita tristeza
me supo a amarga despedida.
Hace ya dos noches que no me visita
ahora soy yo el que tiene miedo,
miedo de no volverlo a ver,
de que por un estúpido deseo
nada vuelva a ser como antes
pienso que si no lo hubiese tocado
aun velaría mis noches
y dejaría que me olvidase del mundo y lo vivido
inmerso en las manchas de su piel.